Para Sofía Jaimes estudiar comunicación es un acto de optimismo y fe absoluta. Para ella esto significa sostener la mirada y resistirse al silencio, creando un espacio en el que abogar por sus principios y valores. Pero esto no es todo cuando hablamos de lo que le apasiona a esta estudiante.
Para ella el arte siempre ha sido una ventana que le ha permitido compartir libremente sus interpretaciones, así como la realidad a la que pertenece. Desde muy pequeña, Sofía tuvo el arte muy presente en su vida. Hoy se adentra en las aguas del diseño, algo nuevo para ella y que define como una disciplina que demanda mucha práctica, estudio y, sobre todo, paciencia.
La venezolanidad: una marca en la vida de Sofía
La venezolanidad y sus cosas siempre ha llamado mucho su atención. El Ávila es una de las cosas más extraordinarias en la vida de Sofía. Siempre ha tenido mucho interés por la arquitectura de la Venezuela del siglo pasado y, como ella lo describe, un amor infinito por la capital y sus tesoros.
Desde que estaba en el colegio, Sofía Jaimes comenzó a coleccionar fotos retro de Caracas y, como no se le daba muy bien el dibujo, empezó a armar composiciones digitales. En un principio le daba pena publicar sus diseños. Pero gracias a la ayuda de un amigo que la impulsó a mostrar lo que hacía en instagram.
Desde ese momento, los comentarios positivos no dejaron de llegar. Eso sí, a Sofía le incomodaba un poco que las piezas llevaran su nombre.. Y es a raíz de eso que nace Ávila Composición. Allí es donde comparte todas las piezas de su autoría.
Ávila composición y los diseños de Sofía
“En medio de la mentira, por encima de ella, en la hendidura, busca este país su verdadero rostro para curarse”. Esta es la frase del poeta venezolano Rafael Cadenas que refleja la intuición de los diseños de Sofía Jaimes.
Para ella, cada una de sus piezas reúne rostros, recuerdos e instantes de un país que aún se rehúsa a desaparecer. La intención de sus composiciones digitales es buscar los pedazos de esa Venezuela fracturada y reconstruir en imágenes lo que se quebró.
“Ávila Composición está orientada a plasmar lo que somos los venezolanos. Es un recordatorio de lo que fuimos y un esfuerzo por no dejarlo morir”…
Este proyecto ha significado un gran reto en la vida de Sofía. Pero simultáneamente ha sido una oportunidad gigantesca en el ámbito profesional. Ávila Composición le ha permitido conectarse con venezolanos alrededor del mundo y le ha abierto muchísimas puertas.
A través de sus composiciones ha logrado llevar su mensaje la exterior. Asimismo, le ha permitido descubrir el trabajo de los artistas del presente, quienes le han servido de inspiración para seguir diseñando.
Mauro Marinelli: de la UCAB al país que queremos
La vida universitaria
En la vida de esta ucabista el arte no es su única ocupación. Sofía Jaimes participa activamente en su centro de estudiantes y en UCAB HNMUN. Admite que algunas veces le cuesta administrar su tiempo, pero siempre encuentra el equilibrio. Todo estos espacios le han brindado experiencias increíbles que hoy en día son su apoyo más grande de su proyecto artístico.
Nos cuenta que en HNMUN ha podido reflexionar sobre conflictos y realidades, las cuales antes solo conocía a través del eco de los medios. Eso la ha llevado a entender al mundo desde otras perspectivas, cuestión que ha influido mucho a la hora de armar el concepto y el mensaje de cada composición.
Hasta el día de hoy Sofía comenta que está muy contenta con el ritmo y el camino de su proyecto, y que desea llegar tan lejos como sea necesario para que su mensaje se difunda. A través de su arte esta ucabista busca recordar en sus piezas el país de un siglo pasado… Los elementos característicos atajados en una realidad nueva. Ávila Composición es ese esfuerzo comunicacional para recuperar el recuerdo.
Sofía Jaimes es una ucabista que de su alma máter se lleva amor y respeto por el país, sentido de responsabilidad, y el compromiso con su entorno. De ella podemos esperar cumplir con la excelencia como norma irrenunciable y que, como ella misma nos comenta, intentar siempre estar a la altura de la universidad a la que representa.